LA PEOR CATA DE CERVEZA

Ayer noche fuimos a una cata de cerveza y maridaje en el PRAE-Restaurante de Valladolid. No esperábamos encontrar gran cosa porque las cervezas eran muy normalitas, pero ya sabéis no podemos resistirnos a todos los eventos relacionados con la cerveza, aunque estuvimos a punto de levantarnos e irnos.

El restaurante muy bonito, pero ya empezamos con masificación de gente, y eso que uno de los puntos clave de una cata es que no haya mucha gente.

El director de la cata, se presento como Mariano Castellanos, maestro cervecero de Mahou, pensé, puede estar interesante entonces, pero pasados dos minutos ya me di cuenta que este tipo poco sabia de cerveza. 

Empezó hablando de la historia de la cerveza, como que los restos más antiguos de la cerveza se encontraros en el Tiber (que para mi se ha ido un poco del mapa), luego contándonos que la malta viene de la cebada de “dos carretas”, y lo repitió varias veces, y como no, habló del árbol del lúpulo., ah!  se me olvidaba, y de que todas las cervezas de abadía, son lagers!! 

Mira! Por lo menos nos llega la comida, que eso si, tengo que alabarla sino si me hubiera ido, por lo menos pague poco por cenar.

Bueno no voy a seguir contando chascarrillos que dijo porque se haría largo, pero lo que no se puede hacer, es dar una cata, a gente que supuestamente no tiene mucha idea de cerveza, y engañarles contando cosas que no son ciertas, y eso que tenia los apuntes delante que no levanto la vista ni para ver si teníamos la cerveza en las copas o no.

Fue una tomadura de pelo en toda regla, no solo en no tener ni idea de cerveza, su elaboración e historia sino también a la hora de catar. A la hora de la misma se saltaba fases y hacía comentarios disparatados según se le iba ocurriendo en el momento de la misma.

De todo esto nos quedo bien claro quien lo pagaba, Mahou, ya que las referencias hacia esta cervecera eran constantes, alabando sus productos, su calidad y etc… . Todo lo anterior teniendo en cuenta que en la cata no figuraba ninguna cerveza elaborada por esta marca, hasta el punto de llegar a intentar desprestigiar gratuitamente el movimiento microcervecero o cervecero casero sin venir a cuento de nada, en resumen esa lección si que la traía bien aprendida el resto, lo fundamental en una cata NO.

En conclusión, se me ha pasado ya la curiosidad de ir a catas de cerveza para salir cabreada, y Mariano, vale que seas el presidente de honor de AMYCE, pero si no tienes ni idea, no te metas!!